10 equipos de fútbol con sponsors no convencionales en Latinoamérica

Wosti por Wosti -

El fútbol también sorprende con sus patrocinadores

Los sponsors poco convencionales en el fútbol latinoamericano nos recuerdan que la creatividad publicitaria no conoce límites. En lugar de ver bancos, apps o casas de apuestas, algunas camisetas se llenan con logos de termotanques, cementos o gaseosas regionales. ¿Por qué sucede esto? A veces es estrategia, otras... necesidad pura. Pero lo cierto es que estos acuerdos dejan huella tanto en los clubes como en los hinchas.

Tigre y el termofón que marcó una era

Durante varias temporadas, el Club Atlético Tigre llevó orgullosamente en su camiseta el logo de Señorial, una marca de termofones y calefones. No es una categoría que uno asocie al deporte, y sin embargo, se convirtió en un ícono. El diseño era directo, grande, casi invasivo. Yo también creía que ese tipo de rubros no se mezclaban con el fútbol… hasta que vi a Tigre salir a la cancha con su termofón al pecho. Y desde entonces, es inolvidable.

Termotanques, lavarropas y algo más

 Club Platense en Argentina mantuvo un vínculo con Longvie, fabricante de electrodomésticos como termotanques, cocinas y lavarropas. Aunque no siempre estuvo en el frente de la camiseta, su presencia constante en cartelería y acciones de prensa dejó huella. Un nuevo caso donde el termofón y el fútbol comparten la misma cancha, y a nadie le pareció extraño. Bueno... casi a nadie.

Cuando una revista política salta a la cancha

Deportivo Riestra, en Argentina, sorprendió al lucir en su camiseta el logo de la Revista Noticias. Sí, una revista de actualidad política en el corazón del ascenso argentino. La jugada fue llamativa y generó debate, porque en el fútbol no es común mezclar contenido editorial con deporte de forma tan directa. Pero ahí estaba, semana tras semana, en el pecho de los jugadores.

Un cemento gigante y una camiseta viral

El Club Deportivo Capiatá, de Paraguay, cerró un acuerdo con Cemento Yguazú. Hasta ahí, todo normal. Pero el diseño del sponsor fue otra historia: ocupaba casi toda la camiseta y desentonaba completamente con los colores del club. Las redes sociales no tardaron en reaccionar. Algunos lo llamaron “la camiseta más fea del fútbol paraguayo”... y probablemente no estaban exagerando.

Política local en plena camiseta

Sport Boys, uno de los clubes más populares del Callao en Perú, estuvo patrocinado durante años por la Municipalidad del Callao y otros entes públicos. Ver a un equipo profesional con eslóganes institucionales en su uniforme resultaba tan raro como fascinante. Un cruce directo entre gestión pública y deporte que, para muchos, se sintió forzado. A mí me pasó que no sabía si estaba viendo un partido o una campaña política.

Un pimiento que dio la vuelta al mundo

Este es un pequeño desvío geográfico, pero vale la pena: en España, el CD Leganés lució como sponsor a la Denominación de Origen Pimiento del Piquillo. El producto era real, sabroso y completamente ajeno al fútbol. Sin embargo, se convirtió en uno de los casos más comentados de patrocinio agrícola en el deporte. ¿Una verdura como sponsor? Sí, y con orgullo.

Bolívar y el cemento como carta fuerte

En Bolivia, el Club Bolívar firmó un acuerdo con Cementos Viacha, dejando atrás marcas globales para apostar por la industria nacional. En un contexto donde los clubes buscan aliados potentes, esta alianza mostraba un vínculo con lo local, aunque para muchos el contraste entre el nombre del equipo y el del sponsor seguía siendo llamativo. Desde mi punto de vista… fue una mezcla extraña, pero auténtica.

Limón Soda: más refrescante que el fútbol mismo

Atlético Tucumán, en Argentina, eligió como main sponsor a Secco, una gaseosa muy popular en el norte del país. La marca tenía presencia, sin duda, pero la imagen en la camiseta hacía que el equipo pareciera más parte de una promoción de verano que de un torneo profesional. Eso sí… nadie se olvidó de ellos. Y de eso se trata.

Un sponsor uruguayo que nadie esperaba

En Uruguay, Cerro Largo FC fue patrocinado por El Clon, una empresa de calefones y repuestos sanitarios. En pleno campeonato uruguayo, ver una marca de ese estilo no era habitual, y sin embargo logró posicionarse. Una vez me encontré con un hincha que decía: “Prefiero un sponsor que me caliente el baño a uno que me vacíe el bolsillo”. Qué decir... tenía razón.

Pintura en lugar de pasión

En Ecuador, el Club Macará lució por años el logo de Pinturas Cóndor. Una marca 100% ecuatoriana que apostó al fútbol como plataforma de visibilidad. Si bien el rubro no es frecuente en camisetas deportivas, la alianza fue coherente a nivel local. Y al final, la gente la recordaba. Ese es el mejor resultado que puede tener un sponsor.

¿Excentricidad, estrategia o pura supervivencia?

Estos ejemplos reflejan que, en Latinoamérica, el patrocinio deportivo tiene reglas propias. Cuando los grandes sponsors no aparecen, se abren las puertas a marcas locales, rubros inesperados y acuerdos que, a veces, parecen chiste (pero son negocio). Y aunque puedan parecer extraños, estos patrocinios le dan al fútbol esa dosis de autenticidad que tanto nos gusta. ¡Y vaya que lo recordamos!